Personal especializado de Gendarmería Nacional y la Policia Científica de la Provincia confirmarían la hipótesis de que el cura Juan Viroche se habría suicidado. Los peritos de la fuerza nacional no encontraron ningún indicio de que el sacerdote haya sido víctima de un homicidio y ya lo había anunciado el cuerpo forense según la autopsia realizada.
La autopsia, realizada por el jefe de forenses de Gendarmería, también habría determinado que no hubo lesiones en el cuerpo del sacerdote. El especialista tomó muestras para realizar estudios más profundos. Los resultados los recibiría el fiscal Diego López Ávila en el transcurso de la próxima semana.
En la Justicia ahora tratarán de profundizar la investigación sobre si Viroche fue inducido a quitarse la vida. Investigan si las amenazas que recibió fueron realizadas por los "narcos" que el denunció o por los parientes de las mujeres con las que habría estado vinculado.
El sacerdote, de 47 años, fue encontrado sin vida dentro de la iglesia, en La Florida. En los últimos años denunció el avance de las drogas en localidades del interior y pidió su traslado porque no solo se veía implicado él, sino su seres queridos.